Al Koala le han puesto en el cole los dibujos de La vida es así. Me lo ha contado este fin de semana tan contenta, porque ahora ya sabe que los virus son bichos feos y malos pero que también están los de color carne que son buenos y nos curan por dentro y llevan burbujitas en la espalda.
Mientras la escuchaba, no he podido evitar acordarme de la primera vez que la Ingeniera de Cominos vio esos dibujos. Salió de clase enfurruñada, diciendo que eran un rollo y que no le gustaban nada. Yo le dije que no me lo podía creer, que esos eran los mejores dibujos del mundo, que eran mis favoritos cuando yo era pequeña y que tooooodo lo que yo sé del cuerpo humano (que según ella es ¡»todo»!) lo aprendí con esa serie.
Entonces me miró muy seria, con esa mirada que sólo mi Comino Mayor sabe poner entre preocupada y espantada, y me dijo «pero, mamá… tú de verdad no te creerás que tenemos toda esa gente ahí dentro, ¡¿no?!».
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